
El 13 de enero de 2023, el sitio de habla alemana Summorum Pontificum, anunció una posible constitución apostólica que limitaría aún más la posibilidad de celebrar la Misa tridentina.
Esta constitución establecería cuatro nuevas disposiciones:
- En ninguna iglesia se podrá celebrar exclusivamente la Misa antigua.
- En las iglesias no se podrá celebrar todos los domingos según el rito antiguo.
- El uso de los libros de 1962 (con las modificaciones ordenadas por Francisco) estará autorizado solo para la celebración de la Misa, pero no para la administración de los sacramentos y sacramentales.
- Todo sacerdote estará obligado a celebrar también según el misal de Pablo VI.
El anuncio de este endurecimiento es, por el momento, solo un rumor. Se explicaría por el hecho de que ciertos cardenales progresistas consideran la implementación de Traditionis custodes demasiado lenta e indulgente.
En su opinión, hay demasiados obispos que aplican las restricciones litúrgicas con vacilación y reticencia. Por lo tanto, un nuevo documento más explícito podría ejercer una mayor presión sobre estos obstinados. A menos que el Rescripto del 20 de febrero que especifica dos puntos de Traditionis custodes sea el texto del que habla el rumor.
Liderando a los opositores de la Misa tradicional está el prefecto del Dicasterio para el Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos, el cardenal Arthur Roche. En un documento de diciembre de 2022, el prelado británico afirmó que "la promoción de la liturgia anterior al Concilio Vaticano II como más santa o más piadosa que la liturgia actual, no es fundamentalmente un problema litúrgico, sino un problema eclesial".
Según él, la unificación litúrgica debe representar la unidad de la Iglesia. Cuando se sabe que la misa nueva no existe, puesto que, en nombre de la creatividad litúrgica, hoy hay tantas misas como celebrantes, podemos preguntarnos si este deseo de unificación no es ante todo un deseo de destrucción de la Misa Tridentina.
El futuro dirá si estas amenazas de restricciones, que afectarán a los miembros de los institutos ex-Ecclesia Dei y a los sacerdotes diocesanos adscritos a la Misa de San Pío V, son reales o no.
Según Summorum Pontificum del 8 de febrero, estos son "más que simples rumores", y el documento debería ser publicado el 4 de abril, aniversario de la promulgación de la constitución Missale romanum de Pablo VI (3 de abril de 1969).